ENTREVISTA A UNA DIRIGENTA SOCIAL

Por Tamara Hommel

Ella es Ximena Ojeda, madre y abuela. Vive en Villa Travesía II JJVV 28D.

Conversé con ella a través del Wathapap y quise saber sobre esta mujer que comparte la vida entre ser mujer y ser dirigenta.

Su trabajo es ser cuidadora de Adultos Mayores. Además, ella es presidenta de la JJVV y es compañera del Partido Comunista.

Ella mira con preocupación el actual momento de pandemia, por lo difícil y la poca acción presencial, insiste en que se podría hacer más, pero ve que hay una cierta inmovilidad que ha provocado el virus ante la posibilidad de contagiarse.

Entre su trabajo remunerado, el de su casa, y de dirigenta tiene que acelerar el día. Me cuenta cómo fueron sus inicios y ya está en su segundo período, reelección.

Ximena ha logrado varios proyectos para su barrio y para la propia sede. Su primera reparación fueron los baños de la sede y trabajó en un proyecto que logró ser la primera sede en la comuna que logró tener un baño para personas con movilidad reducida.

Después vinieron los proyectos de reparación de las canchas del sector, la única techada de Pudahuel Sur, inclusive la cancha de tenis que hoy tiene una importante actividad. "Contamos con una excelente sede que tiene mucha actividades familiares y sociales", se ha preocupado de reconstruir y reparar el local para que los vecinos se sintieran más a gusto en la sede.

Siempre sintió el apoyo de otras mujeres de la municipalidad como de Cecilia Césares, quien le ayudó junto con los funcionarios y funcionarias de SECPLAN a acondicionar una sede para la Unidad Vecinal. Me dice que corre todo el día entre arriendo de canchas, y certificados de residencias.

Llegó a ser dirigenta sin conocer nada de esta actividad social. Poco a poco se fue interesando, aprendiendo, entregando información a vecinos. Nos confirma que hoy se siente bien con lo que hace y para lograr eso "Hay que poner el corazón".

Reconoce que no es fácil ser dirigenta social, ha tenido penas y alegrías, ha aprendido a tener fortaleza. Sabe muy bien que los vecinos caracterizan a las mujeres dirigentas, como personas que "sólo van a tomar té y a copuchar, ese es un trato muy machista y desvaloriza la acción de nosotras las dirigentas".

Dice cuesta movilizar a los vecinos, pero de a poco ha ido estableciendo redes de apoyo. "Pero cuando una está convencida debe dar lo mejor de sí".

Desde la perspectiva feminista quisiera me puedas decir cómo combinas el ser mujer, ser dirigenta. A qué problemáticas machistas te has enfrentado, es decir desde su credibilidad cómo ha sido la recepción de los vecinos vecinas.

"Desde el corazón de mujer por la formación que he tenido, porque lo he luchado desde mi niñez con un matrimonio difícil, uno va curtiendo su organismo. Las mujeres siempre estamos expuestas en el trabajo social, a no ser bien miradas.

Cuesta que se reconozca el trabajo que se hace, he tenido que ir aprendiendo eso, incluso nuestras pares femeninas son las más críticas, nos hacen sentir que el trabajo no es bueno, por lo general, son cuestionamientos que no vienen acompañado de trabajo. Pero desde mi intimidad de mi espacio privado de mujer siento que cuando uno está ayudando al prójimo, no necesita que la estén alabando, yo me quedo tranquila de corazón, he sido un aporte en una casa, en una familia, estar aportando con un grano de arena.

Cuando llego a mi casa recibo las felicitaciones y críticas de mi hijo. Cuento con un buen equipo de trabajo, con la ayuda de una gran mujer, tiene un gran corazón social, es la tía Juanita, Natacha una joven que nos da ideas nuevas, con otras y otros nos ayudamos mucho.

Estoy un poco frustrada, siento que en esta pandemia no hemos estado a la altura, nos preocupa mucho la situación de la gente, no ha existido ninguna información municipal, la municipalidad ha salido poco, siento que no están bien distribuidos los recursos, se ha acostumbrado a la gente a pedir, debieran darse más garantías a los dirigentes para avanzar hacia una gestión más territorial y menos clientelismo.

Siento que la municipalidad pareciera no está trabajando con la realidad de las personas. Hay mucho ego, la comunicación, la información no fluye, eso no puede ser, entonces nos sentimos, marginadas y utilizadas.

Nos preocupa mucho la situación económica de la gente. Pero ante eso estamos planificando algo para ir en ayuda de los vecinos. El municipio no ha trazado líneas para poder trabajo en conjunto, pero no existe hoy, algo pasa que nos tiene complicadas. La pandemia ha traído a la población: soledad, enfermedad, tristeza y hambre.

Estamos organizándonos para ir en ayuda ante la urgencia.

Antes de esta pandemia veíamos la fragilidad en que viven los adultos mayores, los personas que llegaron a vivir por acá cuando todo era muy difícil, que se vinieron c vivir con sus hijos y hoy ese Adulto Adulta Mayor están hacinados, encerrados, psicológicamente no sé cómo van a sobrevivir, sé que ellos son fuertes pero necesitan conversar, estar con los de su edad como los adulto mayores que llegaban a la sede a verse, a tomar su tecito, era un momento muy lindo para ellos ellas ,llegaban con cariño a su sede a conversar con alegría y honestidad. Me preocupan las familias numerosas, los migrantes...

Me gustaría una comuna con más cultura, más limpia, con educación digna y con consultorios dignos para la gente. Que comprendan que quienes van al consultorio son enfermos que van en busca de ayuda, "no se va a pasear al consultorio", falta empatía en los consultorios para atender.

Creo que se ha perdido el trabajo social entre los vecinos, se ha perdido el valor del dirigente social, de escuchar a los dirigentes sociales el dirigente se ha convertido en un agente de proyectos.

Me gustaría una comuna con mejores beneficios sociales para todos, se ha luchado mucho por plazas y canchas, hoy son mejores, pero nos falta mucho más.

Nos falta que la municipalidad escuche más a los vecinos y al dirigente social. Nos falta mucho en lo social, en lo ambiental. Creo que el concejo municipal debería conversar más de las reales problemáticas sociales de la gente, creo que sería todo mejor, se convierte todo en negocio, que buscáramos con algo más sencillo, seriamos más felices, sería una comuna digna solidaria. No queremos comunas hoteles, queremos comunas donde se vivan en los espacios donde nos saludemos, donde nos encontremos, nos acompañemos y vivamos nuestra comuna".